El país noticioso tiene todos los ojos puestos en el juicio por el crimen de Fernando Báez Sosa, en el que está en el banquillo un grupo de amigos acusado de causarle la muerte con golpes de puño y patadas en la cabeza, a la espera de severas condenas. Y lejos de que ese hecho aberrante e inhumano genere conciencia en la sociedad, hechos de similares características se suceden en los primeros días de 2023, casi como un guiño conmemorativo del horror.
El peor de los casos, si sería posible calificarlos por su gravedad, es el asesinato de Agustín Ávila, un adolescente de 16 años que fue atacado por una barra de unas 20 personas en las afueras del predio del Festival de Doma y Folklore de Jesús María el sábado 7 de enero.
Hace pocos días, Agustín viajó con su familia desde Guiñazú para ser parte de una de las fiestas populares más convocantes de Córdoba. Con la ilusión de acercarse lo más posible a la cantante Soledad, que terminaba de actuar esa madrugada, llegó hasta detrás del escenario y allí se desencadenaron los hechos que terminarían con su muerte.
Vanessa, la madre del adolescente, relató al detalle cómo se dieron los hechos y cómo hasta ella fue golpeada por un grupo de mujeres que participaron de la golpiza que terminó con la vida de su hijo. Hay cuatro detenidos.
Pero otros hechos se sucedieron en los últimos días en Carlos Paz, La Falda y Córdoba Capital.
Lucas Ammendola (26) fue atacado por una patota a la salida de un boliche de Villa Carlos Paz en la madrugada del domingo 8 de enero. Fue en pleno centro de la ciudad cerca de las 7 de la mañana.
Su padre, Mauro, aseguró que había salido con otro de sus hijos y amigos, que salieron antes del boliche hacia la Terminal de Ómnibus para volver hacia Bialet Massé, de donde son oriundos.
Sobre la vereda de calle General Paz, a metros de la Iglesia del centro, un grupo de jóvenes atacó a Lucas con rudeza con golpes en el rostro y en el cuerpo. El joven fue asistido en el hospital local donde le suturaron el rostro y le diagnosticaron fractura del orbital.
En La Falda, en tanto, una pareja fue atacada por un grupo de jóvenes en la calle tras una noche en uno de los boliches de la ciudad.
Marcos Paredes denunció ante los medios de prensa que su hijo fue atacado por un grupo de personas que también agredieron a su novia.
El altercado se inició en el interior del boliche a partir de una agresión verbal hacia la chica por parte de un grupo de varones. El joven intentó defenderla y los miembros de la seguridad del local decidieron sacarlos a todos afuera del boliche. Allí se sucedieron los hechos de violencia que terminaron con el joven en el hospital.
El último hecho denunciado tuvo como protagonista a Daniel Valencia, el hijo del astro de Talleres, campeón del Mundo en 1978, que lleva su mismo nombre.
En su cuenta de Twitter, el joven contó que fue abordado por dos hombres al salir de un local nocturno. El hecho ocurrió el viernes pasado y el hijo de la “Rana” Valencia recibió una golpiza que lo dejó inconsciente. Además de golpearlo a patadas en el piso, le robaron su celular.
Un amigo de Daniel recibió un ladrillazo en el pecho cuando intentó defenderlo. “Reconozco estar asustado, pudo ser mucho peor, pero por suerte no fue. Me apena mucho que con todo el caso de Fernando a flor de piel aún no logremos tomar conciencia. Pensar que las cosas pueden ser distintas por 1 centímetro, más o menos, es escalofriante”, sostuvo el joven en su cuenta de Twitter.
La Voz